CARTA A MIGUEL CARCAÑO
Eva Casanueva (madre de Marta del Castillo), escribió una carta al
presunto asesino de su hija (Miguel Carcaño) y se la envió a prisión. En
ella mencionaba:
Seguramente no quieras leer esta carta, pero me veo en la obligación de
hacerlo en una última súplica a la persona que tiene en sus manos
terminar con una interminable tortura que es el no saber dónde está mi
hija. Pensar que por un pacto de silencio ella no reposa donde debería,
en un campo santo, donde será recogida por Dios, donde pueda llevarle
unas flores por su cumpleaños, donde pueda conversar con mi niña.
Imaginar que lo sonrisa que tanto te gustaba de ella se pudre en un
basurero, o en el fondo del río, o sepultada en una tumba, que no es
tumba sino un hoyo escondido para todos o solo para ti. Te suplico una
vez más que me llames o que me escribas, yo solo quiero oírte no
insultarte, ni reprocharte, solo oírte. A veces me pregunto que
intención tiene tu silencio, no quiero imaginarme si tu madre te
estuviese viendo lo que pensaría de ti. De lo que ha pasado, del dolor
que muchos sufrimos de mi propio dolor. ¿Qué te diría cogiéndote de la
mano y acariciándote el pelo?. ¿Qué te pediría ahora que estás preso y
que un futuro tan negro te amenaza?. Con la muerte de tu madre te
quedaste solo, pero con la muerte de mi hija te has quedado vacío, el
vacío en el estómago que no te deja dormir porque no hay acto más cruel y
despreciable que quitarle la vida a una persona y más aun si esa
persona te tenía el cariño que te tenía Marta. Porque Marta siempre se
alegraba cuando las cosas te iban bien. Puede que todo esto te raye, que
te haga sonreír, mientras lees estas palabras escritas desde el dolor
de una madre que se consume, pero quizá algún día comprendas todo el
sufrimiento que estás causando a unos padres y a unas hermanas que a
pesar de todo te siguen llamando “El Miguel”. Solo quiero que me digas
por tu madre, por ti o por mí, Miguel dónde está el precioso cuerpo de
mi niña.
palabras de una madre desesperada. no se merece nadie ese sufrimiento.
ResponderEliminarcomo tiene que estar una madre para llegar a tal extremo...no hay palabras!!!
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